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Felipe respondió: Profesional de Certicalia
Como Ingeniero de Edificación y Arquitecto Técnico solo puedo orientarte en las posibles soluciones en función de lo que necesites y sus exigencias en normativas locales trasladándote una visión general y en función de ello que hacer, tambien puedes optar por encargar a una empresa especializada y que te garantice sus trabajos con emisión de informe en su terminación con ensayos.
Tanto si eres todo un músico profesional como si solo te consideras un aficionado más recuerda que la legislación europea fija en 65 decibelios el umbral a partir del cual los sonidos que nos rodean se convierten en ruido molesto. Así muchas normativas locales reducen ese límite en el interior de una casa a 35 decibelios durante el día y 30 por la noche. No obstante, la mayor parte de los municipios permiten empezar a hacer ruido desde 8 de la mañana y hasta las 21 o 22 horas de la noche.
Las ordenanzas municipales contemplan igualmente el número de decibelios que se permiten en las viviendas, en cuyo caso se tendrán en cuenta tanto la estancia de la casa como el horario.
Obras: Días y horario permitido para hacer obras en casa
Según la normativa vigente, el horario para realizar obras en una vivienda es de lunes a viernes, y se puede hacer ruido de forma general desde las 8 de la mañana hasta las 21/22 de la noche.
Se podrá utilizar maquinaria de 8 de la mañana a 20 horas de la tarde. Hay que tener presente también que se puede llegar hasta 35 decibelios durante el día, y hasta 30 en el horario nocturno.
Música: Horario y decibelios permitidos para ponerla en casa
La normativa anterior no solo se aplica en el caso de tener que hacer una obra, sino en todos aquellos en los que se hace ruido, incluso por el hecho de poner música en una vivienda. Y normalmente, no se pueden superar los 35 decibelios de 8 a 21/22 horas, y los 30 decibelios de 21/22 a 8 horas.
Número máximo de decibelios permitidos en una vivienda
El número máximo de decibelios que se permiten dentro de una casa es un tema que también se debe regular a nivel municipal. Pero como hemos visto ya, de forma general, durante el día no se pueden superar los 35 decibelios, y durante la noche los 30.
Límites sonoros por municipios
Según el municipio se establecen unos límites dependiendo de si se trata zonas sensibles como son los dormitorios o zonas generales de la casa como el comedor:
Interior dormitorios Resto de estancias
Día y tarde Noche Día y tarde Noche
Andalucia 40 30 45 35
Barcelona 30 25 35 30
Bilbao 35 25 35 25
Madrid 30 25 35 30
Valencia 40 30 45 35
Zaragoza 40 27 45 30
Para ello tienes varias opciones, según tu presupuesto:
1. Opción casera con menos dinero
Un buen primer paso, que te ayudará a acolchar el sonido que se traslada al piso inferior en cualquier situación (incluidas también fiestas o películas a todo trapo…), es colocar moqueta o una alfombra tupida en el suelo de dicha habitación. Es especialmente útil con instrumentos como la guitarra acústica o el piano, al absorber una parte de esas vibraciones.
En las paredes puedes colocar paneles de corcho forrados con goma espuma, que después puedes decorar con cualquier motivo de tu elección, cubrir con plantas, pósteres, collages, etc. Para disimular su presencia.
Ten cuidado con dejar descubiertas las esquinas, pues las ondas de la música rebotan en ellas y también deberás ocuparte de estas zonas sin dejar un resquicio por el que tu música pueda escapar a lugares no deseados.
Si tus puertas son huecas o muy delgadas, también dejarán pasar el ruido hasta otras estancias y hacia las casas de los vecinos. Sustitúyelas por puertas de madera maciza y bien gruesa para crear obstáculos fuertes para el sonido. Lo mismo sucede con tus ventanas: puedes cambiarlas por cristales de triple vidrio, y así de paso conseguirás ahorrar mucho dinero en aire acondicionado, en verano, y en calefacción, en invierno.
Ten en cuenta que las cajas de las persianas son otro punto de fuga o entrada de ruido, así como de aire frío o caliente. Aislarlas es mucho más fácil de lo que te imaginas. Te lo contamos en el siguiente vídeo:
Hay, además, pinturas especiales absorbentes de ruidos. Sirven como revestimientos sonoros y son capaces de disminuir la transmisión del sonido hasta en un 30%, una diferencia nada desdeñable que puede hacer soportable el número de decibelios que escapan al exterior de tus dominios.
También existen rodillos de espuma especial para la insonorización de espacios, que incluso vienen con diseños y patrones decorativos muy resultones, como este con apariencia de ladrillos, disponible en distintos colores y grosores.
Usa estanterías con libros para crear otra barrera acústica muy potente. Por supuesto, cuanto más llenas estén de ejemplares, menos hueco quedará para filtrarse el sonido.
2. Opción profesional, con mayor inversión
Si eres un profesional de la música y quieres ahorrarte disgustos con tus vecinos del bloque, ve directamente a lo seguro e invierte algo más de dinero en tu práctica musical, acondicionando tu vivienda con totales garantías.
Lo mejor es que instales una caja flotante, que es como se denomina a una habitación totalmente revestida.
Para ello, sustituye tus suelos por una tarima flotante gruesa y de calidad. Juega con las cámaras de aire para conseguir un aislamiento aún mayor.
En tus paredes, instala un muro doble, añadiendo una capa de aislante entre ambas capas consistentes. Lo mejor es que coloques, como si fuera un sándwich, dos placas de construcción en seco con una de lana de vidrio y otros materiales especializados en hacer una función de barrera sonora.
Existen en la actualidad placas de yeso especiales, perforadas y fonoabsorbentes, a las que se añade zeolita —un mineral de origen volcánico— que funciona como un catalizador natural de las vibraciones acústicas. Estos agujeros en el material sirven para absorber todo tipo de ruidos y evitar la muy molesta reverberación del ruido al exterior de la estancia.
En el techo se puede instalar una falsa cubierta que incluya las capas aislantes ya mencionadas, o poliuretanos aglomerados de alta densidad (PUR), con un grosor de varios centímetros y cubierto después con pladur. Esta solución te podría ayudar a aislar acústicamente el techo sin perder más de 6 o 7 centímetros de altura.
Ten en cuenta que las cajas de enchufes, agujeros para lámparas, interruptores, cajas de persiana, etc., son los puntos más vulnerables y que pueden estropear un gran trabajo de insonorización doméstica. Para evitarlo, hay marcas que fabrican componentes especiales para estos puntos.
Y según todo lo mencionado llegamos a la cuestión de costes:
Hacer de una habitación un espacio adaptado para tocar o grabar música requiere de una serie de trabajos de insonorización. Los fines que motivan esta acción pueden ser diversos, desde evitar la molestia a los vecinos a aislar sonidos para obtener grabaciones de mayor calidad. Para cada objetivo habrá que considerar diversas soluciones según el nivel de ruido que sea necesario amortiguar.
El coste medio de insonorizar una habitación para música es de 150 €/m2. Dependiendo de las condiciones previas que presente la estancia, la clase de aislamiento seleccionado y los materiales utilizados, entre otras variables, es posible que este valor fluctúe entre los 20 y los 400 €/m2.
Aislamiento con obras
El primer paso para aislar una estancia es comprobar el estado de las ventanas. Las opciones pasan por añadir un segundo cerramiento, o bien, sustituirlas por un modelo insonoro de triple vidrio o cámara de aire y perfiles de PVC. Su coste medio ronda los 350 € por unidad. La caja de la persiana puede ser insonorizada de forma económica con poliespan.
En las tareas de aislamiento acústico tienen gran importancia la densidad del material insonorizador, las filtraciones o huecos y las vibraciones. Por ello, entre las soluciones más extendidas están la sustitución o reforzamiento de muros, como serían los dobles tabiques de ladrillo con aislante interior.
Otros métodos serían el trasdosado o el recubrimiento directo sobre la superficie de diversos tipos de paneles, mediante perfiles atornillados. Instalar un tabique de pladur sobre una pared existente utilizando un relleno de lana puede costar unos 140 €/m2.
Para el techo se pueden utilizar falsas cubiertas de pladur sobre las que se incorporen materiales aislantes, como poliuretanos aglomerados de alta densidad, lana de roca u otros.
Aislamiento sin obras
Existe una amplia variedad de opciones para insonorizar una estancia que vaya a ser utilizada como estudio de música o espacio de ensayo en el que tocar instrumentos como la batería, el piano o la guitarra, sin necesidad de realizar obras.
Entre estas tareas pueden mencionarse la sustitución de puertas, el recubrimiento de suelos y paredes con revestimientos de goma y espuma con diferentes apariencias y formatos (en rollo, en forma de losa, etc.), pantallas absorbentes, alfombras gruesas o moquetas, cortinas sonoras, pinturas especiales, etc. Además, puede optarse por insuflar material aislante entre paredes o ladrillos huecos o crear cabinas y cajas aislantes.
Puertas acústicas
Entre las medidas de insonorización que no requieren obras se ha de contemplar, en primer lugar, las puertas, dado que es uno de los puntos que más influyen en el paso del ruido entre una estancia y otra. Existen diversos modelos y tamaños según las necesidades, con niveles que oscilan entre 42 y 53 dB. Su precio suele partir de 300 €.
Cabinas desmontables
Las cabinas modulares proporcionan un elevado nivel de aislamiento y tienen la ventaja de ser reutilizables, lo cual es indispensable para una persona que no descarta futuras mudanzas. Estas cabinas o salas de ensayo son personalizables estética y funcionalmente, pudiendo seleccionar parámetros acústicos, paramentos acristalados u opacos, iluminación y aspecto interior. Dependiendo de sus características y capacidad, estas cabinas tienen un precio que oscila entre 2000 y 10 000 €.
Cajas flotantes
Algo similar a la anterior pero aplicada a una estancia específica, sin posibilidad de reutilización, es la opción de crear una caja flotante. Se consigue creando nuevas paredes, suelos y techos, dejando una separación entre los ya existentes e incorporando diversos materiales aislantes entre ellos. La habitación perderá dimensiones, aunque se aprovecha mejor el espacio con respecto a las cabinas anteriormente mencionadas, y las capacidades de aislamiento son muy altas. El precio medio de esta alternativa se sitúa en 400 €/m2.
Tipo de material
Los materiales aislantes seleccionados destacan además por sus características absorbentes y antivibratorias, como el corcho, la lana de roca o de vidrio, la zeolita, el poliuretano, el poliestireno, la madera, el yeso y diferentes tipos de goma. Su elección puede determinar en buena parte el precio del presupuesto.
Un saludo