Constitución de comunidad de propietarios
en Andalucia

Para obtener una reclamación en una comunidad de propietarios en Andalucía, es importante seguir una serie de pasos que garanticen el debido proceso y la correcta formalización de dicha reclamación.



En primer lugar, es esencial identificar claramente el motivo de la reclamación. Esto podría estar relacionado con incumplimientos del deber de conservación del inmueble, problemas de convivencia entre los propietarios, discrepancias sobre acuerdos tomados en juntas de propietarios, cuotas de comunidad impagadas, o cualquier otra situación disputada dentro del marco de la comunidad.



Una vez identificado el motivo, el siguiente paso es revisar la normativa interna de la comunidad, así como la Ley de Propiedad Horizontal y las disposiciones aplicables en la legislación autonómica andaluza, para determinar si existe algún procedimiento específico a seguir dentro de la comunidad para presentar reclamaciones.



El propietario debe redactar un escrito detallado de reclamación, especificando los hechos, la normativa o acuerdos que se consideran infringidos y, si es posible, aportando pruebas o evidencias que respalden la queja. Este documento deberá ser presentado ante el presidente de la comunidad o, en su caso, al administrador de la finca.



Es recomendable convocar una junta extraordinaria de propietarios para tratar el asunto, en caso de que este no pueda resolverse de manera informal. La convocatoria de una junta extraordinaria puede ser solicitada por un grupo de propietarios que represente, al menos, el 25% de las cuotas de participación o por un número de propietarios que representen al menos el 25% del total.



Durante la junta, el propietario deberá exponer su caso y se abrirá un turno de palabra para que otros propietarios puedan expresar sus opiniones. Después del debate, se llevará a cabo una votación sobre las medidas a tomar respecto a la reclamación, cumpliendo con los quórums y mayorías establecidos por la ley.



Si la junta no ofrece una solución satisfactoria, el propietario disconforme tiene la opción de acudir a la vía de mediación o, en última instancia, presentar una demanda ante los tribunales de justicia, preferiblemente con la asistencia de un abogado especializado en propiedad horizontal.