La permeabilidad al aire de los huecos, ya sean puertas o ventanas, desempeña un papel crucial en la certificación energética de edificaciones. Este elemento es esencial para definir el comportamiento térmico de los espacios habitables, ya sean viviendas o locales. Además, se convierte en un factor determinante al considerar propuestas de sustitución de ventanas, influenciando directamente las medidas para mejorar la calificación energética de los edificios.

¿Pero qué normativa rige este parámetro clave? ¿Cuáles son las exigencias específicas al sustituir puertas y ventanas? Y, lo más importante, ¿cómo se incorpora este dato esencial en CE3X? Estas preguntas encuentran respuesta en este post, donde desentrañaremos los detalles normativos y proporcionaremos claridad sobre cómo abordar la permeabilidad al aire en el proceso de certificación energética.

¿Cómo define el CTE el valor de la permeabilidad de huecos?

La permeabilidad al aire, un factor esencial para el confort térmico en espacios habitables, está definida por el Código Técnico de la Edificación (CTE). Este parámetro refleja la capacidad de una superficie, como ventanas o puertas, para permitir el paso del aire bajo una diferencia de presiones. Expresada en m³/h y evaluada en función de dicha diferencia, la permeabilidad al aire impacta directamente en la calidad térmica de los espacios interiores.

En la actualidad, el Documento Básico (DB) H1 del CTE establece los valores mínimos de permeabilidad al aire en su Tabla 3.1.3.a-HE1, con una sobrepresión de 100 Pa.

permeabilidad al aire de huecos

Los requisitos son más estrictos en las zonas climáticas de invierno C, D y E, con un límite de 9 m³/h.m² (clase 3). Cabe destacar que en la versión anterior del CTE de 2013, este valor máximo era de 27 m³/h.m² (clase 2). Asimismo, resulta interesante señalar que el requisito de 27 m³/h.m² ahora se aplica a las zonas climáticas α, A y B de invierno, donde antes el límite era de 50 m³/h.m² según la normativa previa.


En conformidad con la norma UNE EN 12207:2000, la clasificación de permeabilidad al aire de los huecos se define de la siguiente manera:

  • Clase 1: Cw;100 ≤ 50 m³/hm²
  • Clase 2: Cw;100 ≤ 27 m³/hm²
  • Clase 3: Cw;100 ≤ 9 m³/hm²
  • Clase 4: Cw;100 ≤ 3 m³/hm²

Para quienes están familiarizados con la justificación del CTE 2013, este parámetro no les resultará ajeno, aunque podría sorprender la justificación debido a la mayor exigencia de los valores límite. En esencia, los requisitos para las carpinterías de Clase 1 y Clase 2 en el CTE 2013 han evolucionado a Clase 2 y Clase 3 en el CTE 2019.

Para identificar qué huecos forman parte de la envolvente térmica, se recomienda revisar el Código Técnico de la Edificación 2019: Anexo C (Consideraciones para la definición de la envolvente térmica).

Control de la permeabilidad al aire en edificaciones

La redacción actualizada del Documento Básico HE1 establece claramente que las soluciones constructivas y las condiciones de ejecución de los elementos que componen la envolvente térmica deben garantizar una estanqueidad al aire adecuada. Se presta especial atención a los encuentros entre aberturas y superficies opacas, así como a los puntos de paso a través de la envolvente térmica y las puertas que conducen a espacios no climatizados.

Dentro de la sección HE1, se introduce la exigencia específica de controlar la permeabilidad al aire del edificio. Esta exigencia se aplica a edificaciones de uso residencial privado con una superficie superior a 120 m². La normativa establece un valor límite en este caso particular. En la Tabla 3.1.3.b_HE1 se detallan los valores límite relativos a la tasa de cambio de aire con una presión de 50 Pa, y estos valores están directamente vinculados a la compacidad del edificio.

permeabilidad al aire de huecos

Impacto de los aireadores en la permeabilidad al aire de huecos

Es esencial tener en cuenta la permeabilidad al aire de los huecos al evaluar el conjunto conformado por el marco y el vidrio, considerando también la presencia de ventiladores, en caso de estar presentes.

El Documento Básico HS3 sobre la Calidad del Aire Interior regula el caudal de ventilación en viviendas, afectando directamente a la elección de la clase de ventana. Las carpinterías deben estar equipadas con aberturas que incorporen aireadores o aberturas fijas que funcionen como aberturas de admisión. Estos dispositivos de micro-ventilación deben cumplir con los estándares de permeabilidad al aire según la UNE EN 12.207:2017, ubicándose en la posición de apertura de la clase 1 o superior.

Por otro lado, si la permeabilidad al aire de la carpintería exterior es clasificada como Clase 1 según la UNE EN 12.207:2017, las juntas de apertura pueden considerarse como aberturas de admisión. Estas juntas permiten una ventilación controlada mediante una pequeña holgura de pocos milímetros entre la hoja y el marco. Sin embargo, es importante destacar que esta clase de permeabilidad de carpintería no cumple con las exigencias de la nueva sección HE1, donde el valor mínimo de permeabilidad debe ser de 27 m³/h.m² (Clase 2), mientras que la Clase 1 tiene un valor superior de 50 m³/h.m².

¿Cómo se mide la permeabilidad al aire con aireadores o aberturas fijas en carpinterías?

La evaluación de la permeabilidad al aire según la norma UNE EN 12.207:2007 se realiza de dos maneras distintas:

  • En la posición cerrada, para clasificar ventanas o carpinterías exteriores en general.
  • En la posición de apertura, para determinar la clase de abertura de admisión, como es el caso de los ventiladores o aberturas fijas.

En este sentido, una ventana clasificada según la UNE EN 12.207:2017 no pierde su clasificación al incorporar un ventilador, ya que esta norma evalúa específicamente el comportamiento de las juntas de apertura.

Permeabilidad de huecos con CE3X

Se trata de un parámetro importante dentro de la Certificación Energética a tener en cuenta:

Seleccionar huecos dentro de Envolvente térmica de Edificio

Podemos seleccionar el tipo de estanqueidad del hueco mediante tres opciones:

  • Poco estanco, en caso de ventanas correderas o si presenta rendijas con filtraciones de aire.
  • Estanco, en caso de que no se observe infiltración alguna.
  • Valor conocido, si la ventana está en buen estado y conocemos los valores.

Una vez definidos los valores del hueco, elegimos el tipo de estanqueidad:

Definimos permeabilidad como medida de mejora

Se puede definir la ventana desde 0 a 4, siendo 4 la más permeable, o definiendo el valor de la permeabilidad, con tres opciones:

  • Estanco (50 m³/h.m² a 100 Pa, por defecto).
  • Poco estanco (100 m³/h.m² a 100 Pa, por defecto).
  • Valor conocido.

En conclusión, la permeabilidad al aire de los huecos en la envolvente térmica de un edificio desempeña un papel crucial en la eficiencia energética y el confort térmico. La incorporación de aireadores y aberturas fijas también añade una capa adicional de complejidad, pero estas pueden manejarse eficazmente con el conocimiento adecuado y las evaluaciones precisas.

Así que, en la búsqueda de la máxima eficiencia energética, no subestimemos la importancia de comprender y abordar la permeabilidad al aire de los huecos. Con esta información en mente, estamos mejor equipados para tomar decisiones informadas que no solo cumplan con los requisitos normativos, sino que también contribuyan a un entorno habitable más sostenible y confortable.

Desde Certicalia podemos ayudarte en cualquiera de este tipo de trámites. ¡A sellar cada hueco con eficiencia energética y bienestar!

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