Que el propietario de una vivienda opte por alquilar una o varias habitaciones es una opción cada vez más extendida. Si antes de la crisis esta modalidad de alquiler se asociaba fundamentalmente a los estudiantes, ahora el perfil de quienes están interesados en compartir piso ha dado un giro para abarcar a un público mayor.
La subida de los precios del alquiler, la tendencia a la baja de los salarios y la dificultad para incorporarse o para mantener el empleo ha llevado a que cada vez más profesionales apuesten también por esta modalidad que, prácticamente por las mismas razones, gana atractivo como colchón económico para los dueños de una casa. Ahora, ¿cómo alquilar un cuarto? Te lo contamos.
Alquilar habitaciones
Como en todo, la experiencia es un grado. Por ello, es más que probable que a cualquier propietario que se lance por primera vez al alquiler de una habitación de su vivienda le asalten las dudas. ¿Cómo hacerlo? ¿Cómo encontrar al inquilino adecuado? ¿Es necesario firmar un contrato?
Los mencionados son algunos de los interrogantes que suelen surgir cuando se toma la decisión de alquilar un cuarto. Sin embargo, dos aspectos son determinantes. El primero, que tengas claro que necesitarás un contrato de alquiler de habitación, a ser posible por escrito.
Otro aspecto al que habrá que prestar atención será la localización del inquilino ideal. Compartirás con él o con ella tu propia casa, por lo que este aspecto es crucial para garantizar la convivencia.
Gestión alquiler habitaciones
Tras determinar el precio de alquiler de la habitación (actualmente se sitúa, de media, en España en los 318 euros, si bien los precios son muy variables) y echarle unas fotografías, tú mismo puedes publicar tu propio anuncio a través de internet o en publicaciones convencionales.
Sin embargo, esta no es la única alternativa a tu alcance. Existen multitud de empresas especializadas en la gestión de alquiler de habitaciones que te liberan de todo el trabajo y asumen por ti las tareas necesarias para el arrendamiento.
Aplicaciones alquiler habitación
Otra posibilidad cada vez más extendida es acudir a las Apps de habitaciones en alquiler. Herramientas como Habitoom son cada vez más empleadas en este segmento, en el que también se ha popularizado la aplicación Badi, que obtuvo en 2015 el premio a la mejor App española del año.
Siguiendo con este último ejemplo, la aplicación pone en contacto a personas que buscan habitación y a arrendatarios, que pueden colgar sus ofertas, aceptar o rechazar a candidatos en función de sus preferencias, así como entrar en contacto con ellos vía chat.
Alquilar habitación a turistas
A lo anterior, se suman otras opciones para quienes barajen alquilar una habitación, no para largas estancias, sino para periodos cortos. En este caso se trataría de alquilar habitaciones a turistas, para lo que son muchas las alternativas con las que cuenta un propietario, que puede publicitar su cuarto en plataformas como Airbnb o Homeaway.
En todo caso, sea cual sea la modalidad que elijas y la vía a la que recurras para encontrar a tus inquilinos, no olvides que firmar un contrato de alquiler de habitación será esencial y que, además, tendrás que tributar por los ingresos que obtengas. Así, para que no se te escape ningún detalle y cuentes con garantías de que el proceso se realiza de acuerdo con la legalidad, es recomendable consultar a un gestor o a un abogado especializado antes de dar cualquier paso.