Ingenieros o instaladores especialistas en legalización de instalación de climatización en Madrid

La legalización de una instalación de climatización en la Comunidad de Madrid es un proceso reglamentario necesario para garantizar que las instalaciones cumplen con todas las normativas vigentes de seguridad, eficiencia energética y respeto al medio ambiente. Este procedimiento asegura que los sistemas de aire acondicionado y calefacción se instalen correctamente y de acuerdo con la normativa técnica aplicable.

Todo comienza con la planificación de la instalación por parte de un técnico competente. Este debe diseñar el sistema de climatización siguiendo las directrices de la normativa RITE (Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios). Al tratarse de equipos de aire acondicionado con potencias superiores a 5kW, es imprescindible que un instalador autorizado lleve a cabo la instalación.

Una vez realizada la instalación, el técnico responsable debe elaborar el certificado de instalación, donde constarán todos los datos técnicos del sistema y su conformidad con las normas. Este documento es esencial para la legalización.

El siguiente paso es presentar toda la documentación requerida ante la Dirección General de Industria, Energía y Minas de la Comunidad de Madrid. Esta documentación suele incluir el certificado de instalación, los planos, el certificado de dirección de obra o certificación de fin de obra del técnico competente, y una memoria técnica que detalle las características de la instalación.

Tras la presentación de los documentos, se procede a su revisión. Si todo está en orden, la instalación se inscribirá en el Registro de Instalaciones Térmicas de la Comunidad de Madrid. Además, según el tipo de instalación y su uso, puede ser necesaria una inspección por parte de organismo de control autorizado (OCA) para verificar que la instalización cumple con todas las exigencias normativas.

Finalmente, con la instalación ya legalizada, es importante recordar que debe someterse a un mantenimiento periódico y a revisiones establecidas por la normativa, con el fin de asegurar su correcto funcionamiento y cumplimiento continuo de las disposiciones legales. Además, cualquier modificación o reforma sustancial de la instalación deberá ser comunicada a la Dirección General para su registro y legalización.