Ingenieros o instaladores especialistas en legalizar instalación fotovoltaica aislada en Aragón

Legalizar una instalación fotovoltaica aislada en la Comunidad de Aragón implica cumplir con una serie de normativas y procesos administrativos diseñados para asegurar la seguridad, la eficiencia y la integración apropiada de las instalaciones de energía renovable en el marco energético regional.

En primer lugar, el propietario de la instalación debe realizar un proyecto técnico que detalle las características de la instalación. Este proyecto debe ser elaborado o visado por un técnico competente, como un ingeniero industrial o un ingeniero técnico industrial. El proyecto deberá contemplar aspectos como la ubicación, la potencia instalada, los equipos y materiales a utilizar, y cómo se gestionarán tanto los consumos como la producción estimada.

Una vez completado el proyecto, es necesario presentarlo ante el Servicio Provincial de Industria, Comercio y Turismo correspondiente, dependiente del Gobierno de Aragón. Este órgano es el encargado de verificar que la instalación cumple con todos los requisitos técnicos y de seguridad.

Además, se debe solicitar y obtener la autorización administrativa antes de construir la instalación fotovoltaica aislada y, posteriormente, la licencia de operación una vez realizada, para lo cual es imprescindible realizar una inspección técnica que certifique su adecuación a la normativa aplicable.

Importante es también considerar las normativas municipales, en cuanto a licencias de obras o permisos de instalaciones fotovoltaicas, que pueden variar de un ayuntamiento a otro dentro del territorio aragonés.

Finalmente, la instalación debe ser registrada en el Registro de instalaciones de producción de energía eléctrica de la Comunidad de Aragón, pues aunque la instalación sea aislada y no esté destinada a la inyección de energía en la red de distribución, es necesario que conste oficialmente para contribuir al control y la planificación energética regional.

En resumen, la legalización y registro de una instalación fotovoltaica aislada en Aragón no sólo asegura el cumplimiento de la ley sino que promueve la integración adecuada de las energías renovables en el sistema energético y contribuye a la sostenibilidad ambiental de la región.