Gestión de cotos

¿Qué es la gestión de cotos?

Las autoridades españolas otorgan la titularidad sobre cotos de caza y pesca. Asimismo, permiten que empresas y profesionales especializados los gestionen en nombre del titular. La función del gestor consiste en presentar solicitudes, comunicaciones y notificaciones y encargarse de los trámites que le encargue el titular.

Cuando contratas la gestión del coto de caza, por ejemplo, solicitará permisos de aguardo y traslados y suelta de piezas de caza vivas, así como la captura de especies por daños o para traslado y comercialización.

El gestor también puede presentar la memoria de resultados de caza anualizada, junto con la notificación del plan para el área cinegética, y encargarse del pago de tasas.

También te ofrecerá buscar ampliaciones o segregaciones, su cambio de titularidad, la creación o el cerramiento, el inventario de especies, la repoblación, los planes técnicos de caza y la instalación de capturaderos y dotaciones como lindes, comederos y bebederos. Asimismo, puedes delegar la tramitación de permisos para eventos.

Es posible la gestión de cotos de pesca con los servicios pertinentes. Ambas actividades se encuentran tuteladas por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y se confía su ejecución a la Comunidad Autónoma. Las autoridades determinan los sitios y las especies que puedes capturar.

Los cotos pueden ser privados o locales y tramitas los detalles con el ayuntamiento o la Comunidad Autónoma donde se encuentran. Rindes cuentas sobre la protección de las especies presentes en la zona, incluidas aquellas que no cazas. Además, debes contratar seguros de responsabilidad civil.

También debes notificar acciones como la guardería, la veterinaria, la suplementación, la señalización, las mejoras y el establecimiento de montería o gancho.

Por su parte, la Comunidad Autónoma establece los planes de caza y pesca que considera adecuados para las zonas que gestiona, para permitir que los escenarios sean sostenibles. Además, debe cuidar de que no se afecten otras especies que convivan en la zona.

Por ejemplo, encontrarás planes de caza para las áreas de Alcornocales y Sierra Morena gestionados por la Junta de Andalucía. En ellos, se detallan desde los inventarios hasta la demarcación de zonas para caza menor o intensiva.

Las especies permitidas son perdices, conejos de monte, ciervos, jabalíes y otras, en cotos diferenciados, que van desde las 5 a 25 hectáreas. Pero las autorizaciones tienen en cuenta el inventario de animales y tipo de tierras que habitan. Por eso, pueden cambiar y ser actualizadas en cualquier momento.

También deben gestionarse la liberación de animales para su posterior captura y el adiestramiento de los perros de recogida. Como ves, la complejidad de la gestión crece cada vez más.

Por su parte, la gestión de cotos de pesca también se ejecuta ante las autoridades locales. La Comunidad de Madrid, por ejemplo, los asigna en sorteos públicos y clasifica a los pescadores en sociedades colaboradoras (hasta 6 personas), ribereños (nacidos en las riberas del río o embalse en cuestión) y otros que posean licencia para desempeñar la actividad en la localidad.

La captura de los peces se enmarca en las políticas nacionales y europeas. Y, para valorarla, debes contar con licencia y ajustarte a las exigencias de la localidad.

¿Cómo conseguir una gestión de cotos?

Aspiras a la titularidad de un coto de caza o pesca. ¿Por dónde comenzar? Seguramente, ya has practicado la actividad durante años y te debates entre encargarte personalmente de la gestión o delegar en una empresa o un profesional.

Puedes comenzar por examinar el panorama: ¿ya sabes dónde quieres trabajar o vas a comenzar a explorar el territorio español? Recuerda que el marco legal es nacional y europeo, pero las Comunidades Autónomas ejercen la administración directa. En esa instancia puedes hacerte una primera idea de los requisitos que debes cumplir y si podrás asumirlos o debes contratar al experto.

Para continuar tu gestión, debes participar en el sorteo de asignación del tipo de coto al que aspiras. Las solicitudes pueden ser individuales o colectivas y las Autonomías fijan exigencias por cotos y especies. Los aspirantes deben contar ya con las licencias para la actividad y no pueden tener procedimientos ambientales en contra.

Al ganar el sorteo, puedes colocarte en posición de elegir la zona y pasarás al pago de las tasas correspondientes.

La gestión de cotos de caza y pesca tiene varios grados de dificultad. Los básicos tramitan permisos y pueden reportar resultados. Los avanzados pueden llegar a la cría y suelta de especies y elaboración de planes de mantenimiento para explotaciones intensivas.

Como puedes comprobar, el segundo nivel requiere una combinación de conocimientos veterinarios, en conjunto, con los propios de la caza.

Recuerda que una mala gestión puede conducir a que se obligue a un cambio de titular o se cierre. Por el contrario, la gestión adecuada requiere señalización, planes técnicos, censo de piezas, cálculo de cupos e instalación de infraestructura.

Considera también que el coto está sujeto a cambios legales y también a las inclemencias de la naturaleza, como la escasez de agua o invasión de especies dañinas.

En general, no existen requisitos de profesionalidad, pero debes contactar con personal cualificado para gestionar los servicios. En algunos foros de Internet aseguran que la gestión no suele ser una actividad rentable y, usualmente, se realiza por compromiso con la caza y pesca.

El requisito básico es que cuentes con licencia para realizar la actividad y no estés envuelto en ninguna investigación por delitos ambientales. La gestión de cotos, por ejemplo, puede incluir el cuidado del entorno, lo que incluye la fuente de alimentación.

Cada participante debe portar la licencia en todo momento y justificar tanto sus aperos como los animales que transporta. El gestor debe vigilar la población de la especie y sus depredadores naturales. También debe verificar la intensidad de la explotación junto al cumplimiento de los planes acordados con las autoridades.

En general, las Autonomías autorizan o vedan la actividad por temporadas y pueden regular los horarios, cupos de especies y tamaños mínimos de captura. Por eso, se considera que la gestión es un proceso complejo. También existe el requisito de presentar una memoria anualizada del estado del coto. Como ves, el trabajo puede superar al individuo y requerir la participación de varios especialistas.

¿Cuándo solicitar una gestión de cotos?

El coto es un terreno o cuerpo de agua donde se desarrolla la actividad cinegética. Cada unidad delimitada es continua y solo puede tener dicha funcionalidad visada por la Comunidad Autónoma.

Las autoridades fijan cotos y los pueden asignar por sorteo a los grupos interesados. En España existen cotos privados, intensivos y deportivos. Luego, se encargan de controlar y supervisar la actividad a través de permisos, trámites y notificaciones. Determinan la extensión, la localización, la dimensión de la explotación (menor o intensiva) y las especies que pueden capturarse.

Los gestores de cotos se encargan, precisamente, de esos permisos y tramitaciones. Por ejemplo, acuden al sorteo de un coto de caza pequeño y postulan al aspirante o elaboran el plan y la memoria anualizados sobre la actividad. También pueden encargarse de establecer bebederos y comederos, entre otros temas.

Todo depende de la dimensión del coto, la intensidad de la explotación y las responsabilidades que el interesado decida transmitir. La caza también es fuente de turismo en España y generadora de empleo e ingresos.

Digamos que ya tienes el coto y debes cumplir los trámites y notificaciones periódicos. Usualmente, las empresas dividen sus servicios en básicos y premium o avanzados. En los primeros, suelen incluir los permisos de aguardados y establecimiento de nueva infraestructura, el manejo de caza viva (veterinaria, traslado y suelta), las nuevas solicitudes para captura de especies dañinas o comercialización, los partes de captura, el plan y la memoria de resultados anualizada, el pago de tasas y otros.

Los servicios avanzados suelen dedicarse a establecimiento de cotos, cambio de titularidad, segregación o agrupamiento, cerramiento, inventario, tramitación de instalaciones (como capturaderos), planes técnicos y otras dotaciones (incluidos guarderías y criaderos, repoblación, granjas y eventos).

Pero el alcance de cada servicio y su coste dependen del profesional o de la empresa que contrates. Algunos presupuestarán, incluso, la postulación al sorteo del coto, tramitación de licencias y gestión de socios para las demarcaciones deportivas.

Recuerda que, en la gestión de cotos de caza y pesca, intervienen factores dinámicos. Cazadores y pescadores suelen convivir con el contrapeso de los ecologistas. También la Administración Central busca el equilibrio entre fomentar una actividad lucrativa y la conservación de las especies. Por eso, exige el control de piezas.

Por ejemplo, el atún rojo puede encontrarse bajo veda absoluta o el Tribunal Supremo ordena la erradicación de la trucha arcoíris por considerarla especie invasora. La gestión de cotos de pesca debe estar atenta a los cambios. También pueden limitarse los tamaños mínimos de captura. Por ejemplo, en Navarra se limitaron días, horario de caza y cupos para la perdiz roja y los titulares de los cotos fueron informados por carta poco antes del inicio de la temporada.

Casi paralelamente, Castellón abrió la caza de conejos en los municipios de Benlloch y Vilanova d’Alcolea por una sobrepoblación en territorio vecino al aeropuerto. Se permitió la caza sin límites por considerar que se trataba de una plaga que invadía tanto el propio aeropuerto como territorios agrícolas.

Sin embargo, recuerda que solo puedes cazar y pescar si cuentas con la licencia que te autoriza a ello en un lugar determinado y puedes requerir otras autorizaciones para el traslado de aperos y animales.

Cuanto cuesta gestión de cotos