¿Qué es la licencia de vado?
Según la RAE, un vado, hablando en términos de movilidad urbana, es “la modificación de las aceras y bordillos de las vías públicas para facilitar el acceso de los vehículos a los locales y viviendas”. Etimológicamente, la palabra vado proviene del término latino vadus, que se refiere a las partes de un curso de agua que, gracias a su poca profundidad, permiten el paso de personas, animales o vehículos.
En resumen, es una forma de lograr que solo los coches del propio dueño del vado, como los que acuden a un negocio de reparación de automóviles, tengan acceso.
Para lograr eso, es preciso pedir licencias de vado. También en el caso que se esté realizando una obra en un edificio y se precise que entren camiones al solar para cargar y descargar, además de cuando se necesite esa entrada de automóviles con otros objetivos (por ejemplo, una residencia de ancianos que necesite tener habilitada una entrada o salida de vehículos de transportes adaptados o ambulancias).
Por lo general, los ayuntamientos españoles ofrecen dos tipos de licencia de vado:
- Vado permanente. Es para el uso por tiempo indefinido (es decir, las 24 horas del día los 7 días de la semana, sin importar que sea festivo o no). Este vado es el adecuado para señalar la entrada y salida de un garaje, ya que los usuarios de dicho parking pueden entrar o salir cuando quieran del mismo. Solicitando el vado permanente te aseguras que, además de que el ayuntamiento de tu ciudad te permita realizar las obras de rebaje necesarias en las aceras para la entrada y salida de coches, no habrá coches aparcados delante (bajo pena de multa) y así puedas utilizar tu plaza de aparcamiento cuando quieras.
- Vado no permanente. Son vados que se solicitan para poder tener despejada la entrada durante unas horas y unos días determinados. Son muy utilizados por lo general por los negocios de reparación o venta de automóviles, ya que solo precisan que la puerta esté despejada durante el tiempo en el que el local está abierto (por ejemplo, de lunes a viernes entre las 9 de la mañana a las 8 de la tarde), no teniendo que pagar de más por tener despejada la entrada en momentos que no se necesita (durante la noche, los festivos…). Los ayuntamientos también facilitan que se realice el rebaje de las aceras para permitir la perfecta utilización del mismo.
Además, también hay licencia de vado para ocasiones especiales:
- Cuando se está realizando una obra, para permitir la entrada y salida de camiones al solar, facilitando la carga y descarga de materiales. Estos vados no suelen ser permanentes, sino por un tiempo limitado (señalado en semanas o meses). Después el vado desaparecerá.
- Vado para eventos y espectáculos. Este tipo de vado está pensado para liberar la entrada y salida a un recinto, pero solo durante el tiempo que dure el evento: desde el montaje al desmontaje. También tiene un tiempo limitado señalado en semanas o meses.
La diferencia de estos vados con los anteriores es que el ayuntamiento pone más pegas a la hora de rebajar las aceras, ya que no se mantendrán a lo largo del tiempo, sino que se buscan soluciones temporales, como el crear una rampa con hormigón para que los camiones puedan entrar y salir sin dañar los bordillos.
¿Cómo conseguir una licencia de vado?
Como estamos viendo a lo largo del artículo, conseguir una licencia de vado es sencillo, aunque siempre hay que tener en cuenta algunos requisitos. Simplemente, habrá que acudir a las oficinas del ayuntamiento, rellenar la solicitud y aportar los documentos que te soliciten, además de abonar las tasas correspondientes.
En toda solicitud de licencia de vado es preciso señalar la clase de vado que se solicita (si permanente o por horas), así como los días y horas que es preciso su uso, la situación exacta del inmueble en la vía pública, la finalidad del local para el que se está solicitando el vado y un plano a escala del local. Además, hay que tener en cuenta las características propias del vado.
- Cuando un ayuntamiento aprueba un proyecto de edificación, si en este existe una entrada de vehículos, automáticamente se concederá el vado.
- Si el vado se solicita para el acceso a locales, es imprescindible aportar la documentación de la licencia de obras, de instalación y de apertura.
- Para vados de acceso a obras, hay que explicitarlo en la propia solicitud de licencia, o bien en un documento adjunto a la misma (como ya hemos apuntado, explicando la clase de vehículos que entrarán y saldrán).
Una vez que se ha presentado la solicitud de licencia de vado para la entrada y salida de un local e inmueble (recordamos, debes acudir a tu ayuntamiento para que te expliquen qué debes aportar a tu solicitud y la forma de hacerlo, puesto que en cada ciudad es distinto), el propio ayuntamiento debe poner en marcha a sus técnicos para aprobar o no dicha solicitud.
La solicitud de licencia de vado será enviada al Departamento de Control de Tráfico, que deberá ser quien finalmente revise y valore. Además, los servicios técnicos municipales deberán indicar si es posible la ejecución del vado y las características propias del mismo, con un plano de situación adjuntado.
Aunque los técnicos se encargan de valorar si es posible crear el vado o no en el lugar solicitado, la última palabra sobre la otorgación o no la tiene el alcalde de la localidad por lo general, salvo que otra administración tenga potestad sobre estos trabajos.
Así pues, desde que se registra la solicitud de licencia de vado hasta que se consigue la misma (si es que es aprobada y se ha presentado la documentación de manera adecuada) suelen pasar 2 semanas, así que mejor realiza estos trámites con tiempo suficiente para no tener que esperar por ella.
¿Cuándo solicitar una licencia de vado?
Si para entrar en tu garaje necesitas pisar la acera o tienes un negocio de venta o reparación de automóviles o motos, seguramente necesitas que te rebajen la acera, y que no puedan aparcar coches delante, dejándote así la entrada y salida despejadas: para ello, tienes que solicitar una licencia de vado al ayuntamiento de tu ciudad.
Para poder conseguir una licencia de vado, solo hay que tener en cuenta los requisitos que marcan los ayuntamientos (por lo general, son todos muy similares). Además, hay que tener en cuenta que se tarda unas 2 semanas en la resolución y en otorgar esos permisos, por lo tanto, hay que hacerlo con tiempo suficiente.
Solo los propietarios y poseedores legítimos de los locales pueden realizar la solicitud de vado permanente u horario. También los arrendatarios de los inmuebles o los locales de negocio a los que aquel haya de permitir el acceso, siempre y cuando cuenten con la conformidad del propietario, aunque serán los que tienen alquilado el local los responsables del cumplimiento de las obligaciones que se recogen en cada reglamento.
La mayoría de los locales que se encuentran en bajos de edificios pueden solicitar un vado:
- Garajes y viviendas unifamiliares, tal y como se recoja en el PGOU (Plan General de Ordenación Urbana).
- Los locales que vayan a destinarse a uso de garaje, siempre y cuando tengan una capacidad para al menos 4 vehículos, y 100 metros cuadrados de superficie. En el caso de ser garajes de entre 50 y 100 metros cuadrados, el vado puede solicitarse siempre y cuando las plazas de garaje en su interior sean superiores a las plazas de aparcamiento que se eliminan en superficie.
- Todos aquellos locales que sean destinados como aparcamientos públicos, siempre y cuando estén registrados en el PGOU con tal fin.
- Venta y reparación de automóviles, siempre que cuenten con la correspondiente licencia municipal para desarrollar esta actividad.
- Almacenes o los locales destinados a cualquier otra actividad empresarial que necesite la entrada de vehículos para la carga y descarga. El ayuntamiento debe haber dado permiso para realizar esa actividad en el local.
- Clínicas y residencias de dependientes o ancianos, siempre que el ayuntamiento conozca y haya permitido dicha actividad en el inmueble. Estos son necesarios para la entrada y salida de ambulancias o vehículos de transporte adaptado.
- Entidades bancarias, que precisen la entrada y salida de vehículos con fondos o valores.
- Para obras de construcción, reformas, demoliciones o reparación de edificios, siempre que el ayuntamiento haya dado permiso para la realización de dicha obra. Este caso es especial puesto que es preciso señalar el tipo de vehículos que utilizarán el vado (peso y caracteres especiales).
- En circunstancias especiales a las que hemos descrito anteriormente (por ejemplo, para facilitar la entrada y salida de vehículos durante la celebración de un espectáculo, así como durante los trabajos de montaje y desmontaje del mismo). El ayuntamiento debe conocer y haber dado licencia para esa circunstancia especial.
Cómo ves, es bastante probable que el propietario o el arrendatario de un local o inmueble pueda solicitar un vado, siempre y cuando tenga todos los permisos necesarios para llevar a cabo la actividad que va a realizar en el mismo.
Normativa y requisitos de la licencia de vado
A la hora de pedir una de estas licencias, debes saber que comprende unos derechos, pero también unas obligaciones en forma de requisitos que hay que cumplir, mucho más allá del pago del precio de los trámites tal y como haya señalado tu ayuntamiento, o en el que se encuentre el local para el que quieras pedir el vado.
Cada localidad tiene sus propios reglamentos para la concesión de vados en inmuebles o locales, por eso no se puede señalar una normativa general a toda España. Eso sí, los requisitos suelen coincidir, y también aquellos puntos que hacen que la licencia de vado no sea otorgada.
Por ejemplo:
- Cuando delante del local se encuentren jardines o árboles, y la realización del vado evite su normal conservación. También se evitan los locales que cuentan con farolas o mobiliario urbano delante.
- Cuando se encuentren a una distancia mínima de los semáforos para así permitir la normal circulación de vehículos.
- Cuando para entrar en el vado sea preciso realizar maniobras, entorpeciendo el tráfico.
- Cuando en la calle donde se está solicitando el vado ya haya demasiados, y se entorpezca el paso normal de peatones, o no queden plazas de aparcamiento en superficie suficientes para dar servicio a los residentes de la zona.
- En caso de que el vado se encuentre cercano a un monumento histórico y desentone con la arquitectura cercana. Es decir, en los locales que se encuentran en los barrios antiguos es más complicado que se concedan vados, ya que el propietario o el arrendatario debe seguir unas normas especiales para poder realizar las obras.
La licencia de vado lleva acompañada la entrega de unas placas que señalizan el mismo (si es permanente, en muchos ayuntamientos se encargan también de eliminar las marcas que permiten el aparcamiento y pintan una línea amarilla que lo prohíbe), y que es preciso colocar al lado del portón de acceso del local de manera bien visible.
Por último, recordemos que la licencia de vado, una vez que ha sido otorgada, debe renovarse año a año (mediante el pago de las tasas correspondientes) y conlleva unos derechos y obligaciones para el solicitante:
- La realización de obras de rebaje de los bordillos de las aceras.
- Impide el aparcamiento de cualquier vehículo en las líneas marcadas, incluso coches o motos del propio solicitante. Es decir, cualquier viandante, o la policía propiamente, puede denunciar ese aparcamiento, lo que supone una sanción para el propietario del automóvil estacionado allí.
- Permite que los vehículos entren y salgan del local, pasando por encima de la acera.
Las administraciones públicas facilitan en pdf los documentos que se deben rellenar para solicitar un vado en las ciudades. Puedes descargarte como ejemplo el de la ciudad de Madrid en su web.
Cuanto cuesta licencia de vado
La Licencia de Vado es un permiso que conceden los ayuntamientos para permitir el acceso de vehículos a una propiedad cruzando la acera. Esencial para accesos a garajes, negocios o fincas, esta licencia señaliza el lugar y establece restricciones de aparcamiento frente al mismo.
El costo de obtener una licencia de vado depende de varios factores y puede variar significativamente entre los distintos municipios. Factores como el tipo de vado (permanente o temporal), la ubicación de la propiedad (céntrica o periférica), la clasificación de la calzada (principal o secundaria) y el uso que se le dé (residencial, industrial, comercial), influirán en el precio.
En general, el coste anual de mantenimiento de un vado permanente oscila entre 60 y 200 euros, mientras que la tasa por instalación o alta de nuevo vado puede variar entre 30 y 150 euros. La licencia de vado temporal suele tener un precio menor. Además, se deben considerar los costes adicionales que pueden incluir los trabajos de adecuación del acceso y la señalización horizontal y vertical, que pueden suponer una inversión adicional.
Es importante recordar que el proceso también puede generar costes administrativos adicionales y que se debe consultar la ordenanza fiscal de cada ayuntamiento para obtener una idea precisa del coste en la localidad correspondiente.
