¿Qué son los sondeos de agua?
Los sondeos son perforaciones del terreno, y los sondeos de agua, lógicamente, sirven para localizar y alcanzar aguas subterráneas para su aprovechamiento.
El sondeo de agua no es lo mismo que un pozo. El pozo tiene poca profundidad (habitualmente unos 10-12 metros, aunque sí es cierto que hay pozos muy hondos) y gran anchura (más de 1 m de ancho), mientras que los sondeos son perforaciones muy estrechas que se adentran cientos de metros en la corteza terrestre. Los sondeos pueden llegar a acuíferos cuyas partes más superficiales se encuentran a kilómetros del punto de origen del mismo.
También difieren en sus características. El sondeo de agua suele consistir en tuberías perforadas que permiten el paso del agua en las paredes del sondeo. Su construcción requiere maquinaria muy especializada y la explotación exige una bomba.
La elección de uno u otro dependerá de tus necesidades de agua y de la que haya disponible.
La construcción de un sondeo de agua es una obra de gran impacto y dificultad que no puede hacerse sin una gran formación profesional, maquinaria de precisión y especial cuidado medioambiental. El sondeo es una acción de enorme impacto, pues puede alterar el equilibrio del acuífero, desecarlo y contaminar las capas freáticas. Algo que tiene un impacto directo en los ecosistemas que se encuentran en la superficie y puede, además, acelerar la salinización y desertización de los suelos.
Hay que comprender que no se trata de excavar hasta encontrar agua. Requiere técnica y conocimiento, tanto para llegar al acuífero como para saber aprovecharlo al máximo de manera activa e inteligente, superando retos como la distancia y el tipo de suelo que se va a encontrar.
Por lo tanto, no puede hacerse a la ligera. No se trata de tener la maquinaria a mano y taladrar el suelo al gusto. La ley exige que esta delicada obra deba hacerse con un proyecto técnico profesional. Todos los sondeos de agua necesitan un proyecto. La buena elaboración del proyecto de sondeo es el trámite necesario para solicitar el permiso de obra a la Administración. Y sin permiso de obra, no hay sondeo.
Recuerda que el proyecto de captación de agua subterranea te permite conseguir la licencia de obra, pero la explotación del agua subterránea de tu parcela requiere una autorización especial. El sondeo de un pozo de agua ejecutado debe legalizarse para poder ser utilizado. Un organismo autonómico competente en materia de medio ambiente, es quien te permitirá el acceso al acuífero. Y, por otro lado, el proyecto de ejecución te permitirá llevar a cabo las obras para llegar a él. Son cosas distintas.
Normativa y requisitos para sondeos de agua
–Directiva 2000/60/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 23 de octubre de 2000, que establece un marco comunitario de actuación en la política de aguas. La UE, con el convencimiento de que el agua es mucho más que un bien comercial y preocupada por la situación hídrica del continente (contaminación de los acuíferos, desertización, salinización, etc.), dispone con esta directiva un marco de actuación común para todos sus miembros en lo que respecta a los usos y protección de los recursos hídricos. ¿Cómo se aprovecha? ¿Cómo se usa? ¿Cómo se protege el agua? Aquí puedes estudiarlo.
– Real Decreto Legislativo 1/2001, de 20 de julio, de la Ley de Aguas. En el texto de la Ley de Aguas encontrarás toda la información que necesites sobre los usos y la regulación de los recursos hídricos, y cómo afecta a tu sondeo de agua. Por ejemplo, en el art. 54 se regula el uso que puedes hacer de las aguas que hay en tu finca.
– Real Decreto 849/1986, de 11 de abril, que aprueba el Reglamento del Dominio Público Hidráulico. Ten en cuenta este reglamento y sus modificaciones, que desarrollan la Ley de Aguas, para tu sondeo. ¿Qué requisitos se plantean? ¿Cómo legalizar tu sondeo de aguas?
– Real Decreto 927/1988, de 29 de julio, que aprueba el Reglamento de Administración Pública del Agua y de la Planificación Hidrológica. ¿Cuáles son los organismos de cuenca? ¿Cómo se administran y gestionan? ¿Qué funciones tienen y cómo te afectan si quieres construir un sondeo de agua? Aquí podrás verlo.
– Legislación autonómica. Las comunidades autónomas pueden tener transferidas ciertas competencias sobre la gestión de los recursos hídricos, así como en lo referente a minas y proyectos de obra. A la hora de llevar adelante la solicitud de un sondeo de aguas deberás informarte de las normas y obligaciones específicas de tu comunidad.
– Legislación municipal. Los ayuntamientos también desarrollan sus propias normas, especialmente en lo que respecta a urbanismo y concesión de licencias de obra. Si necesitas ejecutar un sondeo de aguas, deberás ponerte en contacto y trabajar con tu Administración local.
Como en todos los trámites administrativos, pueden surgir muchas dudas, casos especiales y detalles en los que no pensamos hasta que los tenemos delante. Por ejemplo, no puedes solicitar el aprovechamiento de un acuífero en zona de sobreexplotación, pero quizá no sepas que se te permite si has iniciado los trámites antes de que se declarara en esa situación.
Ante las dudas, lo mejor es que acudas a los profesionales, ya que son ellos los que están más al tanto de los imprevistos normativos y de la legislación autonómica y municipal.
Asegúrate de recurrir a expertos formales. Por ejemplo, desconfía de las empresas que te dicen que solo necesitas una licencia de obra, porque para acceder al acuífero también hace falta la autorización administrativa del organismo autonómico competente en medio ambiente. Piénsalo de esta manera: puedes construir una carretera, pero tu coche necesita un permiso de circulación para que puedas disfrutarla.
¿Cuándo solicitar un proyecto de sondeos de agua?
Riego para explotación agraria, explotación ganadera, actividad industrial, abastecimiento de urbanizaciones o simple y llanamente uso doméstico para tu vivienda. Hay múltiples motivos por los que necesitar agua en tu predio. Si la actividad de tu finca requiere de agua pero no está disponible a una distancia digamos «cómoda» (no hay agua superficial, y los pozos no llegan al nivel freático necesario) o el agua disponible es insuficiente, entonces puede ser una buena idea recurrir a un sondeo.
Puedes hacer tantos sondeos como permita el organismo autonómico correspondiente, aunque si tu parcela no es muy grande seguramente todos se nutrirán del mismo acuífero. Y si la finca es deficitaria de agua, tener más sondeos no ayudará mucho a mejorar el caudal de riego.
Debes solicitar el proyecto del sondeo de agua al proyectista antes de solicitar la licencia de obras, lo que supone un plazo de entre 1 y 6 meses de antelación. En ese tiempo deberán realizarse diversos estudios técnicos que serán incluidos en el proyecto.
También deberás tener en cuenta los plazos de legalización del sondeo. Es el conjunto de trámites necesarios para que un sondeo o pozo de agua pueda ser utilizado de forma legal, cumpliendo con la normativa vigente y con todas las garantías. Y es un procedimiento que puede alargarse mucho tiempo. Los organismos de cuenca competentes para legalizar tu sondeo de agua pueden demorarse de 9 a 36 meses.
Por lo tanto, considera todos estos plazos a la hora de llevar adelante la construcción de un sondeo. Es un trabajo que verá sus recompensas, pero que puede implicar un largo proceso, algo que quizá afecte a tu actividad profesional o productiva.
La explotación de un sondeo para abastecimiento de agua debe registrarse y admitirse legalmente. No basta con hacer la perforación, la explotación del agua debe autorizarse. Deberás presentar la solicitud de aprovechamiento, que registrarás debidamente en al sección A o en la sección B según sea el tipo de explotación que pretendas disfrutar. Tu explotación se encontrará en el registro en la sección B si cumple los siguientes requisitos:
– La explotación es igual o inferior a 7 000 m³ anuales.
– El sondeo y su uso se encuentran en la misma finca registral.
– No son aguas superficiales. Es decir, no hay un arroyo a menos de 100 m.
El registro en la sección A será para los sondeos que no cumplen esos requisitos. Si vas a explotar más de 7 000 m³ al año o aguas superficiales o pretendes el aprovechamiento en una finca catastral diferente, debes legalizar el sondeo para incluirlo en la sección A del registro, y esto recibe el nombre de «concesión de aguas».
Sea como sea la explotación, no podrás legalizar un sondeo en un acuífero que tenga la declaración de sobreexplotado. Esto quiere decir que el acuífero no dispone de agua suficiente y debe protegerse de más explotación. Si se da el caso, no podrás usar tu sondeo.
¿Cómo solicitar un proyecto de sondeos de agua?
El proyecto de sondeo de agua es un informe o documento de gran dificultad. Requiere conocer al detalle una maquinaria muy especializada y una obra muy delicada. Por eso, solamente podrán realizar un proyecto de sondeo de aguas ingenieros, ingenieros técnicos o graduados de la especialidad de Minas. Si el sondeo va a requerir la construcción de instalaciones eléctricas, será necesaria la participación de un ingeniero industrial para el proyecto eléctrico.
Para conocer al detalle los documentos que necesitas para caracterizar el terreno, deberás dirigirte al organismo autonómico que tenga delegada la competencia sobre aguas subterráneas (Agencia del Agua u otra entidad pertinente de la comunidad autónoma). De no existir ese organismo, deberás dirigirte a la Administración estatal (Confederaciones Hidrográficas, que dependen del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente).
Tu ayuntamiento será la Administración competente a la hora de solicitar las licencias de obra.
La ejecución del sondeo precisa del permiso de la sección de Minas de la correspondiente Consejería. Este permiso de investigación te faculta para ejecutar el sondeo y determinar si existe agua y cuánta.
Como se señala arriba, lo primero que deberás hacer es dirigirte al organismo competente para conocer al detalle los documentos que necesitas para determinar las características del terreno. Según sean, afectarán de una manera o de otra al proyecto de sondeo de agua.
Una vez que conozcas esa información debes localizar a un profesional, un titulado en Ingeniería de Minas, que actuará como proyectista y se hará cargo de los aspectos técnicos. Es posible que el proyecto necesite un proyecto eléctrico. Si es el caso, para esa parte deberás acudir a un ingeniero industrial.
El proyecto ejecutivo debe ser visado por el colegio profesional y luego presentado ante la Administración para obtener el permiso o licencia de obra.
Los estudios específicos que deberán realizarse para incluir como documentos del proyecto dependerán de las necesidades concretas de la situación y la zona en la que se pretenda ejecutar el sondeo, así como de la normativa particular que establezca la comunidad autónoma. Sin embargo, este sigue siendo un proyecto de obra y deberá realizarse según ciertos parámetros básicos, así como contener unos estudios e informes mínimos. El proyecto debería contemplar:
– Memoria. Aquí se expondrían los antecedentes, el objeto del proyecto y diversos estudios e informes: estudio geológico, descripción de las obras, un resumen del presupuesto, las condiciones y el plazo de ejecución, la disponibilidad de los terrenos, los requisitos ambientales, permisos, licencias, personal implicado...
– Anejos. Se incluirían documentos como el plan de obra, estudios hidrogeológicos, sondeos eléctricos y electromagnéticos, análisis del movimiento de tierras, una descripción del método y la maquinaria, etc.
– Planos. General y de detalle, así como el catastral del sondeo, el mapa geológico, el corte geológico, el plano de la instalación, un croquis del sondeo, etc.
– Estudio básico de seguridad y salud. Con su propia memoria, pliego de condiciones y planos.
– Pliego de condiciones técnicas. Suministros, ejecución, desarrollo del trabajo, mediciones, etc.
– Presupuesto.
Cuanto cuesta sondeos de agua
Los sondeos de agua son procedimientos vitales para acceder a reservas subterráneas de agua, usualmente para abastecimiento agrícola, industrial o doméstico. El costo de estos procedimientos varía según múltiples factores, como la profundidad de perforación, la dificultad geológica del terreno, la localización y el diámetro del pozo.
Un sondeo para agua puede costar entre 1.500 y 5.000 euros, dependiendo de la complejidad y los materiales empleados. La perforación básica de un sondeo sin ningún tipo de instalación adicional, como la tubería y la bomba, podría rondar entre 60 y 100 euros por metro, con precios que oscilan dependiendo de la geología del lugar, siendo más caro perforar terrenos rocosos que sedentarios.
La elaboración de un presupuesto detallado requiere considerar aspectos como el estudio geotécnico previo, que podría costar alrededor de 600 a 1.000 euros, y el proyecto técnico necesario para la legalización del pozo, cuyo coste puede ser entre 500 y 2.000 euros.
Finalmente, los costos auxiliares, incluyendo la instalación de una bomba de agua y la construcción de una caseta para proteger la maquinaria, pueden añadirse al gasto general del proyecto. Es crucial realizar un estudio detallado y obtener la asesoría adecuada para garantizar tanto el acierto técnico como la viabilidad económica del sondeo de agua.
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