Puede que todos alguna vez en la vida nos tengamos que enfrentar a una gran decisión: comprar un piso. Son muchos los factores en juego que nos pueden llevar a tomarla, así como las sensaciones que viviremos en el proceso. Pero hay una cosa que está clara. Es muy importante que nos sintamos seguros en cada paso que damos. ¡No os preocupéis! Hemos venido para daros el punto de confianza que os faltaba.

Todos aquellos que ya hayan pasado por esto querrán daros consejos para comprar un piso, no hay nada mejor que la experiencia, claro. Así que atentos, aquí van las claves para comprar un piso de forma segura.

¿Qué opciones tengo?

Lo primero que tienes que hacer para comprar un piso es valorar las distintas alternativas. Estamos acostumbrados a comprar por inmobiliaria, pero no es la única opción. También se puede comprar a través de organismos oficiales. ¡Veamos!

  • Viviendas de protección oficial: puedes acceder al mercado público, aunque debes cumplir una serie de requisitos para comprar este tipo de inmuebles.
  • Viviendas de entidades financieras: a veces los bancos también disponen de propiedades destinadas a la venta. Aun así, esta opción y la anterior solo representan el 5% de las oportunidades del mercado.
  • Viviendas de particulares: es la opción más habitual. En este caso, tenemos dos opciones. Comprar a través de agencias inmobiliarias tradicionales, cosa que supone unas comisiones de entre el 3% y el 5%, o lo que es lo mismo, entre 9.000€ y 15.000€ sobre el precio de venta. O comprar de particular a particular que aunque nos dé cierta incertidumbre por ser algo nuevo, plataformas como Housfy te darán la asistencia que necesites. Y, además, te ahorrarás las comisiones.

¿Qué necesito para comprar un piso?

A la hora de comprar un piso hay algo muy importante: el dinero. Así que antes de lanzarnos a ello debemos comprobar cuáles son nuestras capacidades. Esto también nos ayudará a decidir el presupuesto, es decir, cuánto estamos dispuestos a gastarnos en la nueva vivienda.

Necesitarás tener ahorrado aproximadamente el 30% del valor de la vivienda que quieras adquirir. Esto se debe a que el banco no acostumbra a financiar el 100% sino como máximo el 80%, de ahí el 20%. Por otro lado, necesitaremos tener ahorrado lo equivalente a los impuestos derivados de la transacción de compraventa. Estos acostumbran a representar el 10%.

Por lo tanto, si estuviéramos interesados en un piso de 200.000€ lo ideal sería disponer de aproximadamente 60.000€.

En cuanto a la solvencia financiera, ésta debería ser la suficiente como para poder afrontar la cuota de la hipoteca. ¿Cómo lo calculamos?

Para poder hacerle frente se aconseja que las cuotas no sean más altas que el 30% de los ingresos mensuales. Es decir, si la suma de los ingresos mensuales de una familia es de 3.000€ la cuota máxima seria de 900€.

Aun así, cada banco es un mundo y lo que te pidan para comprar un piso puede variar. Por esa razón, es recomendable que te dirijas a una entidad financiera, o incluso varias, para que te realicen un estudio antes de buscar tu propiedad ideal. De esta forma, sabrás cuál es tu potencial máximo de compra y cuando veas el piso que te gusta ya tendrás la financiación aprobada.

¿Cómo sé que estoy realizando una compra segura?

Ya has encontrado la vivienda de tus sueños y solo te queda dar el paso definitivo. Puede que en este momento te aborden las dudas, tranquilo/a. Hay una serie de pasos que te indicarán que estas comprando un piso legalmente. Y otras, que aunque no sean indispensables, te darán seguridad.

  • Comprueba que la vivienda no tenga cargas financieras: asegúrate de que no tenga una hipoteca pendiente, que esté embargada, etc.
  • Pide la ITE: el piso tiene que cumplir unos requisitos básicos de estructura registrados en el informe de la Inspección Técnica de Edificios. Es como la ITV de los pisos y ¿verdad que no compraríais un coche sin la ITV?
  • Relacionado con el punto anterior, recomendamos que contrates una visita con un arquitecto. Así, te aseguras de que la vivienda está completamente en buen estado evitando preocupaciones futuras.
  • Cédula de habitabilidad, Certificado Energético, recibos del IBI del año en curso, últimas facturas y recibos pagados de suministros, etc. Todos ellos son los indispensables en cuanto a documentación.

Puede que algunos de estos puntos te parezcan complicados, pero no estás solo. Comprar una vivienda es fácil siempre y cuando estés bien asesorado. Por eso, plataformas como Housfy ayudan a que puedas hacerlo directamente, de particular a particular, y sin intermediarios de agencia. Y lo más importante, de forma segura.

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