Si hay algo en estamos de acuerdo con nuestro vecinos es en ahorrar energía.
El ahorro energético en nuestras viviendas nos preocupa y tomamos medidas para ahorrar energía en nuestras casas. No debemos olvidar la energía común que gastamos en nuestro edificio. El ahorro energético en comunidades de propietarios es posible y en es un objetivo en el que seguro, todos los propietarios coinciden.
Para planear las actuaciones adecuadas que nos lleven a disminuir el consumo de energía en nuestra comunidad de propietarios es recomendable que un especialista haga un estudio detallado del consumo de energía del edificio. Este análisis incluirá el estudio de la envolvente (fachadas y cubierta), de las calderas, ya sean de calefacción o de agua caliente, de los sistemas de iluminación comunes del edificio y de los ascensores. Entre las intervenciones que conseguirán ahorrar energía en nuestro edificio, estas son las más comunes:
Sustitución de las calderas centrales de calefacción y agua caliente por sistemas más eficiente: gas o biomasa
La generación calefacción y el agua caliente siempre es más eficiente si se produce desde una caldera central. Son estas instalaciones las que conllevan el mayor gasto energético en una comunidad de vecinos, 40% la calefacción y 20% el agua caliente. Los cambios de caldera más habituales en edificios ahorra energía son: – Caldera de gasoil por una de condensación o de baja temperatura con gas natural. – Caldera de carbón por caldera de biomasa. Ambas intervenciones suponen un ahorro de energía de un 40% respecto a la anterior caldera.
Sistemas de iluminación adaptados a las zonas comunes
En las zonas comunes, portal, rellanos y garaje es imprescindible sectorizar la iluminación para que solo se consuma energía en las zona en la que es necesaria. Además es importante activas sistemas de temporizador para que las luces se apaguen de manera automática. La sustitución de lámparas convencionales por iluminación LED puede lograr ahorros de hasta el 80% del consumo de iluminación ene zonas comunes. En las zonas ajardinadas del exterior del edificio conviene instalar células fotoeléctricas, que cortan el suministro cuando la luz natural llega a cierto nivel.
Rehabilitación energética de la fachadas
Esta es sin duda una de las medidas más efectivas para ahorra energía en una comunidad de vecinos. La gran parte del calor que producimos con las calderas de calefacción se escapa por la fachada. Añadir aislamiento por el exterior puede suponer un ahorro del 50% en el gasto energético de tu edificio. Los sistemas más habituales de rehabilitación energética de fachadas son: – El sistema SATE ( Sistemas de Aislamiento Térmico Exterior) Se trata de fijar aislamiento por el exterior del edificio en plachas o paneles. Los paneles de aislamiento más habituales suelen ser de poliestireno expandido y planchas de lana mineral. – Las fachadas ventiladas. Se añade un cerramiento al edificio dejando una separación con la fachada original y creando así una cámara de aire que actúa como acumulador de calor, evitando que el calor del interior escape gracias al aislamiento térmico.
Renovar los ascensores más antiguos por ahorro y por seguridad
Es importante que los ascensores cuenten con mecanismos de maniobra selectiva para activar la llamada más cercana y evitar que se hagan viajes con el ascensor vacío. Otro factor a tener en cuenta es la iluminación del ascesor. No es necesario que esté permanentemente iluminado. Se puede solucionar con un detector de presencia p con un mecanismo que asocie la iluminación a la apertura y maniobra del ascensor.
Sistemas de agua caliente a través de placas solares en la cubierta del edificio.
La colocación de placas termo solares en la azotea de una comunidad de vecinos puede cubrir la demanda de entre el 50% y el 70% del agua caliente del edificio.