Certificado de solidez. Normativa y requisitos
En la web del Código Técnico de Edificación pueden descargarse, en formato pdf, toda la documentación necesaria para poder realizar un certificado de solidez y seguridad.
- Real Decreto + Parte I
- Seguridad estructural
- Seguridad de utilización y accesibilidad
- Seguridad en caso de incendio
- Ahorro de energía
- Salubridad Disposiciones legislativas
- Protección frente al ruido
Tal y como decíamos, hay unos requisitos mínimos que deben cumplir los inmuebles para obtener el certificado de solidez y seguridad. Están regulados por las normativas de seguridad y estabilidad estructural.
El Código Técnico de Edificación de España describe en su Parte I, artículo 10, las exigencias básicas de seguridad estructural.
En este texto se dice que el objetivo de este punto es el poder asegurar que el edificio será resistente en materia estructural a las influencias previsibles a las que se verá sometido durante las obras de construcción y rehabilitación, así como durante el uso que se prevé.
Para ello, los edificios deben ser proyectados, así como fabricados y construidos cumpliendo la fiabilidad que se establece en los Documentos Básicos: DB-SE-AE Acciones en la edificación, DB SE Seguridad Estructural, DB-SE-A Acero, DB-SE-F Fábrica, DBSE-C Cimientos y DB-SE-M Madera. Si la estructura es de hormigón, deberá regirse por la Instrucción de Hormigón Estructural vigente.
Además, en el mismo artículo, en el apartado 1, se describen las exigencias básicas de resistencia y estabilidad. Éstas deben ser las adecuadas para que no existan riesgos indebidos. La construcción deberá mantener la resistencia y la estabilidad durante el proceso de modificación de eelementos y deberán prever las acciones o influencias que este sufrirá durante estas obras. Además, también se evita con ello que un evento extraordinario produzca consecuencias desproporcionadas respecto a la causa original y pueda darse lugar al mantenimiento previsto.
En el punto 2 del Artículo 10 del CTE se explica cuál es la aptitud al servicio. Debe ser conforme con el uso previsto del edificio. Debe evitarse que se produzcan deformaciones inadmisibles, además de limitar a un nivel aceptable la probabilidad de un comportamiento dinámico inadmisible y que no se produzcan degradaciones o anomalías inadmisibles.
Las exigencias básicas de seguridad en caso de incendio vienen recogidas en el artículo 11 del CTE. Se centra en reducir al mínimo (límites aceptables) los riesgos que corren los usuarios e inquilinos del edificio de sufrir algún tipo de daño por un incendio accidental. Este apartado viene definido por las características propias tanto del proyecto, como de las labores de construcción, los usos que se le darán y las operaciones de mantenimiento que se deben llevar a cabo.
Para ello, todas las labores en las que está en juego la estructura del edificio (proyecto, construcción, mantenimiento y uso) se realizarán cumpliendo con la normativa que se indica en el Documento Básico DB-SI.
El Reglamento de seguridad contra incendios en los establecimientos industriales será aplicado si el inmueble objeto de la certificación se encuentra en zona de uso industrial.
Hay 6 apartados en el artículo 11 del CTE, donde se explican las exigencias básicas en materia de seguridad ante incendios.
- Limitar la propagación interior del incendio por el edificio, tanto al mismo como a otros colindantes.
- Limitación del riesgo de propagación del incendio por el exterior.
- Exigencia de tener planes de evacuación de los ocupantes del edificio.
- Para detectar, combatir y exterminar los incendios serán necesarios equipos adecuados e instalaciones especializadas para ello.
- Facilitar la intervención de los bomberos y equipos de rescate.
- Resistencia estructural frente a los incendios.
Debido a la gravedad de situaciones tales como un incendio, es de vital importancia cumplir con toda la normativa vigente y estar actualizado a este respecto.
Cómo solicitar un certificado de solidez
Para solicitar un certificado de solidez y seguridad se debe acudir a un técnico competente, que en la mayoría de los casos será un arquitecto o arquitecto técnico, aunque también pueden tramitarlo ingenieros. Esta persona deberá presentarse en la oficina de urbanismo del ayuntamiento donde se encuentre el inmueble, realizar las inspecciones que sean precisas y entregar la documentación solicitada.
A la hora de solicitar un certificado de solidez y seguridad deben aportarse una serie de datos, aunque cada ayuntamiento tiene sus procesos propios. Los más comunes son:
- Datos administrativos del inmueble. Dónde se encuentra situado el inmueble, cuál es su valor catastrar, si está al corriente de los pagos, quién o quiénes son los propietarios…
- Los usos del inmueble, tanto los pasados como los futuros para de esta manera evaluar si el edificio o inmueble está adecuado para que estos trabajos se puedan desarrollar en las máximas condiciones de seguridad estructural y anti incendios.
- Las características de los materiales utilizados en la construcción o en la rehabilitación del inmueble. De esta manera se puede evaluar si las medidas de prevención de incendios son las adecuadas, o si los materiales utilizados resistirán el paso del tiempo.
- Características y verificación de la estructura del inmueble. El técnico debe evaluar si la estructura del inmueble está en condiciones óptimas para que dentro de él se puedan realizar las actividades proyectadas.
- Estimación de cargas. Sabiendo el peso de las cargas que deberá sostener la estructura, se puede valorar si es la adecuada para la actividad que se va a desarrollar en las instalaciones.
- Ensayos en la estructura. Son trabajos propios de ingenieros y arquitectos, centrándose en la normativa vigente.
- Posibles patologías. En la documentación se deberá indicar si el edificio está sufriendo algún tipo de patología en su estructura, para estimar de esta manera si resistirá a los usos que se le va a dar en óptimas condiciones.
El precio para la obtención de un certificado de solidez y seguridad variarán según el despacho de ingenieros y arquitectos al que se les solicite el trabajo, pero por lo general están entre los 400 euros y los 500 euros.
Este precio incluye:
- Inspección del inmueble por un técnico colegiado, que será un arquitecto, ingeniero o arquitecto técnico según el caso concreto.
- La redacción del certificado de seguridad y solidez según un modelo estandarizado.
- La entrega del certificado de seguridad y solidez, firmado y visado por el Colegio profesional correspondiente.
Por lo general, los despachos hacen entrega del certificado de solidez y seguridad en dos formatos: en papel y de manera digital.
Cuando se solicita el certificado de solidez
Ten en cuenta que el tiempo para facilitar un certificado de solidez y seguridad dependerá de la experiencia y el tamaño del equipo que lo haga, así como de las dimensiones del proyecto. Es una buena opción actualizar la certificación cada cierto tiempo, para poder contar con él en caso de que sea necesario.
Como se apunta en el párrafo anterior, certificado de solidez y seguridad es necesario en muchas ocasiones durante la vida útil del edificio, por lo que es recomendable tener uno disponible de manera continua.
Algunos casos en el que los propietarios del inmueble necesitarán un certificado de solidez y seguridad.
Para la rehabilitación de los edificios, asegurándose de esta manera que las obras podrán realizarse en máximas condiciones de seguridad estructural e incendios. Es decir, que, aunque se den golpes y se tiren paredes, el edificio seguirá en pie en óptimas condiciones. Intervenciones con cambio de uso.
A la hora de solicitar permisos y licencias para la apertura de una nueva actividad. Es decir, cuando el inmueble vaya a destinarse a una actividad distinta a la que fue proyectada en un primer momento, o de la manera en que llevaba funcionando en los últimos años. Por ejemplo, es muy común en países de Europa la desacralización de iglesias para convertirlas en centros de trabajo: para que puedan funcionar como tal, precisan un certificado de solidez y seguridad.
Para la venta de los inmuebles. Antes de comprar un edificio, local, casa o nave industrial, el inversor pedirá un certificado de solidez y seguridad. De esta manera se asegura que el inmueble cumplirá con los requisitos para poder desarrollar la actividad en él que tiene en mente.
Si se va a añadir algún elemento que afecte a la carga estructural o a la normativa de incendios. Es básico tener un certificado de solidez y seguridad si se van a añadir terrazas, carpas, jacuzzis, o en el caso de la industria, máquinas pesadas o equipos distintos a los que había. Un ejemplo sería el de los edificios construidos sin ascensor, pero a los que se les va a añadir: necesitan tener el certificado de solidez y seguridad para asegurar que la estructura resistirá, y que, además, el plan de seguridad y evacuación de incendios estará acorde a la normativa.
Legalización de las viviendas, sobre todo en aquellos casos cuando se cambia el proyecto inicial: por ejemplo, si se le añade una planta más a la edificación, se indicará cómo afecta a la estructura y que esta será resistente.
Para solicitar un certificado de solidez y seguridad se debe acudir a un técnico competente, que en la mayoría de los casos será un arquitecto o arquitecto técnico, aunque también pueden tramitarlo ingenieros. Ésta persona deberá presentarse en la oficina de urbanismo del ayuntamiento donde se encuentre el inmueble, realizar las inspecciones que sean precisas y entregar la documentación solicitada.
Cuanto cuesta certificado de solidez
El coste de un Certificado de Solidez puede variar considerablemente dependiendo de factores como la ubicación del inmueble, su tamaño, el uso del edificio y la complejidad de la inspección técnica necesaria para emitir el certificado.
De forma general, el precio promedio de un Certificado de Solidez puede oscilar entre 200 y 700 euros. Es posible encontrar precios más bajos, alrededor de 150 euros, para propiedades pequeñas y de fácil inspección.
Sin embargo, para inmuebles grandes y aquellos que requieran un estudio más detallado, el costo puede elevarse hasta los 1000 euros o más. Es importante tener en cuenta que estos precios son aproximaciones y pueden variar, por lo que es recomendable solicitar varios presupuestos a profesionales para obtener una cifra más ajustada a la situación específica del inmueble en cuestión.
