Arquitectos e ingenieros especialistas en proyecto instalación de ascensor en Lugo

La realización de un proyecto de instalación de ascensores en la provincia de Lugo comprende diversas fases, tanto técnicas como administrativas, que aseguran su correcta implementación y funcionamiento, garantizando a su vez la seguridad y el cumplimiento de las normativas vigentes. En primer lugar, se lleva a cabo un estudio de viabilidad que considera las características del edificio, tales como su antigüedad, estructura existente, y el espacio disponible para la instalación del ascensor. De forma paralela, se revisa la normativa local y autonómica aplicable para los ascensores en Galicia, con especial atención a la accesibilidad y seguridad. Una vez se determina la viabilidad, comienza la etapa de diseño, donde ingenieros y arquitectos elaboran el proyecto técnico, eligiendo el tipo de ascensor más adecuado en función de las necesidades de uso, la capacidad, la velocidad, la tecnología, y el impacto estético y funcional en el edificio. Se redactan planos, memorias descriptivas, cálculos y se define el presupuesto detallado de la obra. Simultáneamente, se gestionan los permisos y licencias requeridos ante el ayuntamiento de la localidad correspondiente de Lugo y otros organismos competentes. Esta gestión incluye, pero no se limita a, licencias de obras, estudios de impacto ambiental y cualquier otro trámite burocrático necesario. Con todos los permisos concedidos, se procede a la licitación y contratación de la empresa instaladora, que deberá cumplir con las regulaciones y estándares de calidad y seguridad industrial. Una correcta selección del contratista es crucial para el éxito del proyecto. Durante la fase de construcción o instalación, se realiza una supervisión continua por parte de la dirección facultativa para asegurarse de que la obra se ejecuta de acuerdo con el proyecto y las normativas. Esto incluye la realización de pruebas de carga, inspecciones de seguridad y ajustes finales. Finalizada la instalación, se llevan a cabo las inspecciones regulatorias y la obtención del acta de puesta en marcha que certifica el cumplimiento de todas las normas y la seguridad del ascensor. Por último, se forma a los usuarios y al personal de mantenimiento, y se establece un contrato de mantenimiento para asegurar el correcto funcionamiento y la durabilidad de la instalación a lo largo del tiempo.