¿Cuándo solicitar un estudio termográfico?
Es necesario para averiguar el estado de una vivienda y sus instalaciones sin hacer grandes desembolsos para mantener un adecuado mantenimiento.
Puedes solicitarlo cuando desees conocer cualquier defecto en las instalaciones o irregularidades térmicas por defectos de aislamientos, humedades, puentes térmicos, fugas de aire, etc. antes de realizar pequeñas o grandes reformas.
También será esencial cuando contrates a un profesional técnico para elaborar un proyecto de obra, un peritaje o una certificación energética para verificar que todo funciona perfectamente.
Los estudios termográficos se usan para el mantenimiento, rehabilitación, control de calidad y diagnóstico de construcciones y edificaciones. También pueden destinarse a la inspección de instalaciones térmicas como las placas solares o las turbinas eólicas.
Su aplicación se ha extendido a los campos de la medicina y la veterinaria para observar lesiones, a los procesos industriales para mantener el buen funcionamiento de la maquinaria, a los sistemas de seguridad con el detector de calor y los sensores infrarrojos, a la navegación y la automoción para encontrar averías o fallos mecánicos como obstrucciones, sedimentos o malos aislamientos.
En el campo de la electricidad es donde más utilidad se le ha dado, ya que el estudio termográfico de los cuadros eléctricos elimina muchos de los peligros y riesgos que los técnicos tenían que sufrir al trabajar con este tipo de instalaciones, pues es una técnica que trabaja sin contacto con el objeto. Sirve para descubrir sobretensiones, diferencias de temperaturas, fuentes de calor externas, deterioros, malas conexiones, etc.
Se utiliza mucho el estudio termográfico a la hora de realizar auditorías energéticas, ya que ofrece un método fiable, rápido y eficaz de localizar puntos de calor por donde se pierde energía y ayuda a obtener un material que facilita redactar los informes, pues es una forma muy visual de mostrar el problema.
A la hora de inspeccionar construcciones puede servir para detectar humedades por filtraciones de agua o fugas que a largo plazo pueden crear serios problemas.
Por increíble que parezca se emplea incluso para estudiar patrimonio histórico-artístico que se encuentra enterrado o en antiguos cerramientos. También para rehabilitar cuadros de gran valor artístico.
Esta técnica puede ser de ayuda para controlar las plagas de insectos como las termitas que dejan huecos de aire en la madera, permitiendo localizarlas y exterminarlas.
Es muy útil en obras para determinar qué desperfectos deben ser reparados, para reparar componentes electrónicos o encontrar algún fallo y para el mantenimiento preventivo de cualquier objeto, de modo que te adelantes a los problemas y puedas prevenir estancamientos en los procesos de producción o deterioros en la construcción de un edificio.
Si vas a pedir un estudio termográfico debes hacerlo con suficiente antelación. Si se trata del estudio de una instalación térmica, bombas, placas o aislamientos, deberías recibir el informe en unos tres o cuatro días. Pero si el estudio es más complicado por tratarse de un edificio o una fábrica, ten en cuenta que tardará varias semanas.
Lo mejor será que consultes a la empresa contratada o al profesional sobre el plazo de entrega del informe, ya que si se demora demasiado la avería puede empeorar o bien ocurrir algún accidente si el problema no se soluciona ágilmente.
El sitio donde debes entregar el estudio termográfico de tu edificio o vivienda dependerá del objeto del estudio en concreto. Será un órgano competente de la Administración, el propietario de las instalaciones o un juez en caso de estar inmersos en un juicio por daños, indemnizaciones o reclamaciones.
¿Cómo conseguir un estudio termográfico?
Debes acudir a una empresa especializada en mantenimiento que realice actividades preventivas a través de la termografía.
La propia empresa de mantenimiento o la empresa especializada en materia energética se encargarán de realizarte el estudio. También puede hacerlo un técnico especializado cuando lo consideres necesario. Es un estudio bastante complicado de llevar a cabo y solo los ingenieros especializados o técnicos acreditados en el uso de cámaras termográficas pueden ejecutar estos trabajos sin riesgos y con total seguridad. Además, ellos cuentan con toda la formación necesaria para saber interpretar las imágenes que reciben de la cámara termográfica.
Se necesitan todos estos conocimientos y un equipamiento especial para trabajar en estas actividades.
El costo de un estudio termográfico dependerá del tiempo empleado en él, de su complejidad y del volumen de trabajo que tenga, así que no podemos concretártelo.
Si te encuentras en alguno de los casos de los que hablábamos anteriormente y requieres un estudio termográfico, lo mejor será que contactes con empresas especializadas o profesionales cualificados para que se hagan cargo del trabajo.
El técnico visitará tu edificio, empresa o instalaciones con su cámara termográfica y tomará algunas fotografías de todas las áreas que considere que debe estudiar. Una vez tomadas estas, es posible que te ofrezca algún análisis o conclusiones sobre lo que ha visualizado en la cámara, pero será más acertado si se toma tiempo en estudiar las imágenes una por una y en conjunto para evaluar si existe algún daño y su procedencia. Además, algunos profesionales cuentan con programas de edición de imágenes para entender mejor lo que ven.
Toda la información que las imágenes nos ofrezcan será lo que contenga el informe.
Un estudio termográfico deberá contener:
- Una descripción detallada del edificio o maquinaria objeto del estudio.
- Emplazamiento, localización geográfica y descripción de la zona en la que se encuentra.
- Una descripción de los materiales constructivos.
- Hoja de especificaciones de la cámara termográfica y de todo el material utilizado.
- Empresa encargada de la inspección junto a la capacitación de sus trabajadores o formación recibida por el técnico profesional contratado.
- Fecha y hora de la inspección, identificando con exactitud las zonas inspeccionadas.
- Alcance de la inspección realizada mencionando los aspectos que abarca.
- Medidas recogidas por los sensores de presión, temperatura, dirección y velocidad del viento, radiación solar y humedad atmosférica desde 24 horas antes hasta el final de la inspección.
- Reportaje fotográfico de todas las zonas inspeccionadas y datos obtenidos.
- Análisis e interpretación de los resultados de la inspección.
- Conclusiones y recomendaciones.
¿Qué es un estudio termográfico?
Un estudio termográfico es una herramienta muy útil para el mantenimiento de todo tipo de instalaciones. Es un mecanismo preventivo que permite localizar en los edificios o construcciones el sitio donde hay defectos de funcionamiento o de construcción para evitar un futuro problema.
Este método te permitirá medir la temperatura de los cuerpos a distancia gracias a la radiación infrarroja.
El estudio irá acompañado de otros tipos de informes o certificados que recojan todos los aspectos de las instalaciones como la eficiencia energética, boletines de calefacción o proyectos de obras.
La termografía es una técnica mediante la cual se puede transformar la radiación térmica emitida por un cuerpo u objeto en una imagen visible que se debe interpretar. Puedes usarla en multitud de cuerpos como motores, transformadores, edificios, viviendas, hornos, cámaras frigoríficas, cuadros eléctricos, edificios, bombas, instalaciones...
Lo cierto es que esta tecnología existe ya desde hace muchos años, pero su uso aún no se ha implantado del todo en nuestro país, cosa extraña si se piensa en los múltiples usos que se le pueden dar.
Se realiza utilizando una cámara termográfica que apuntaremos hacia el cuerpo que queremos estudiar, sin entrar en contacto con él. El resultado será una imagen termográfica que nos mostrará las diferentes temperaturas en el área concreta o de la instalación mientras está funcionando.
Es un estudio fácil de realizar, que no necesita obras, ni toma de muestras ni catas. No es destructivo, sino que simplemente toma fotografías de los distintos objetos o zonas y a través de un equipo específico se utiliza la radiación térmica para identificar puntos calientes que denotan problemas potenciales. Y no solo no produce tareas adicionales, pues tampoco interrumpe las que se estén produciendo ni ningún proceso productivo. El estudio termográfico se puede llevar a cabo mientras se realizan otras obras y sin ocasionar destrozos.
Te ayudará a reducir costes al localizar rápidamente todas las averías y los fallos disminuyendo actuaciones de mantenimiento, y además te ahorrará posibles obras que tendrías que realizar si utilizaras cualquier otro método. Incluso, como hay algunos fallos o desperfectos que no son visibles, hacerlo con material especializado es mucho más seguro y fiable.
Realizar un estudio termográfico te ayudará a optimizar los recursos que tienes, ya que se reducirán los tiempos de reparación pues sabrás con exactitud el lugar de la avería.
Por supuesto, un buen mantenimiento de tus instalaciones te permitirá alargar la vida útil de las mismas y usar la energía de manera más eficiente, consiguiendo mayor ahorro energético y un menor impacto ambiental.
Todo esto favorecerá que tu póliza de seguro baje de precio, pues la mayoría de las empresas aseguradoras premian a las empresas y usuarios que utilizan los estudios termográficos para el mantenimiento de sus equipamientos.
Normativa y requisitos del estudio termográfico
Las normas ISO son aquellas que regulan la gestión de la calidad, establecidas por ISO, la Organización Internacional de Normalización. Este conjunto de normas se aplican a todos los tipos de organizaciones y actividades que estén orientadas a la producción de bienes o servicios a nivel europeo e internacional.
La norma ISO 18434:2008 recoge la condición de vigilancia y diagnóstico de máquinas de termografía y proporciona una introducción a la aplicación de la termografía infrarroja, introduce terminología nueva respecto a la termografía, describe los tipos de procedimientos, los criterios para evaluar las anomalías descubiertas por el estudio termográfico, métodos y requisitos para ejecutar este tipo de actividades, recomendaciones de seguridad, formas de interpretar los datos y requisitos de presentación de informes. Esta norma es vital conocerla para llevar a cabo estudios termográficos.
La norma ISO 18436:2004 establece los requisitos de formación y certificación del personal, por ejemplo para organismos de certificación y procesos de formación.
La norma ISO 9712:2005 concrea la calificación y certificación de todo el personal que ejecuta estudios termográficos no destructivos.
Por su parte, las normas UNE son estándares españoles creados por los comités de normalización de la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR). Estas normas son importantes en la gestión de la calidad para organizaciones y actividades dirigidas a la producción de bienes y servicios.
En concreto, la norma UNE 60300:2007 recoge una guía de aplicación en el mantenimiento y la logística del mantenimiento.
La norma UNE 20654 estableció la guía de mantenibilidad de equipos añadiendo nuevos aspectos como la planificación del mantenimiento o los ensayos de diagnóstico. Establecer una planificación del mantenimiento, siempre que este se respete y sea ejecutado correctamente, te ayudará a alargar la vida útil de tus aparatos y equipos, a aumentar la seguridad en su uso y, por tanto, aumentar también la confiabilidad de un buen servicio. Finalmente, un mantenimiento adecuado reducirá visiblemente los costes de producción y reparación.
Los ensayos de diagnóstico son esenciales para conocer las condiciones actuales de los aparatos: si operan o no correctamente, si están dañados, si están reparándose, si están desgastados...
La norma UNE 13829:2002 va dirigida a la medición de la permeabilidad de edificios, construcciones o alguna de sus partes con la finalidad de medir cualquier fuga de aire que pueda aparecer a través de las envolventes de una edificación. Está pensada, sobre todo, para conseguir un verdadero aislamiento térmico en los edificios y determinar la verdadera estanqueidad de los mismos.
Y ya para terminar, citaremos la norma UNE 13187:1998 que establece todas las prestaciones térmicas de las que debe disfrutar un edificio, así como el método y el procedimiento previstos para detectar la posible presencia de irregularidades en los cerramientos de los edificios, lo cual también puede hacerse mediante el sistema de infrarrojos del que venimos hablando.
Cuanto cuesta estudio termográfico
Un estudio termográfico es una técnica que permite analizar edificaciones o instalaciones eléctricas mediante una cámara termográfica, que capta la energía infrarroja emitida por los cuerpos y la convierte en una imagen visual. Este método es un excelente recurso para detectar problemas de aislamiento, puentes térmicos, humedades, fugas, sobrecalentamientos eléctricos, entre otros, sin necesidad de contacto o intervención destructiva.
El coste de un estudio termográfico varía dependiendo de múltiples factores como la envergadura del proyecto, la complejidad de la instalación, el tipo de edificio, la localización, y la cantidad de elementos a inspeccionar. Sin embargo, generalmente, el precio para una vivienda o pequeño local puede estar alrededor de 200 y 400 euros, mientras que para edificios de mayor tamaño o inspecciones industriales, el rango de precios puede elevarse, llegando incluso a superar los 1.000 euros.
Al calcular el presupuesto de un estudio termográfico, profesionales calificados también considerarán el tiempo que llevará realizar el servicio, los equipos utilizados y la posterior elaboración de un informe detallado. Dicho informe es fundamental, ya que no solo documenta los hallazgos, sino que también proporciona recomendaciones para mejorar la eficiencia energética o corregir las anomalías detectadas. En definitiva, un estudio termográfico es una inversión inicial que puede llevar a un ahorro significativo a largo plazo al optimizar la eficiencia energética y prevenir costosas reparaciones.
