Segregación vivienda
en la provincia de Santa Cruz de Tenerife

La segregación de una vivienda en la provincia de Santa Cruz de Tenerife consiste en dividir una propiedad horizontal o verticalmente para crear varias unidades independientes, que posteriormente pueden venderse o utilizarse de manera separada. Este proceso implica una serie de pasos administrativos y legales que deben cumplirse para asegurar su validez y registro oficial.

Para iniciar el proceso de segregación, el propietario deberá contratar los servicios de un técnico competente, como un arquitecto o ingeniero, para que elabore un proyecto de segregación. Dicho proyecto debe cumplir con la normativa urbanística del municipio donde se ubica el inmueble, respetando los requisitos de edificabilidad, ocupación y uso del suelo, así como la normativa de habitabilidad.

Una vez realizado el proyecto, el siguiente paso es obtener la licencia de segregación del ayuntamiento correspondiente. Para ello, se debe presentar la solicitud acompañada de la documentación técnica requerida, incluyendo el proyecto de segregación y una declaración responsable del técnico, que asegura que la segregación cumple con todas las ordenanzas municipales y autonómicas.

Con la licencia de segregación concedida, se debe formalizar la nueva división de la propiedad en una escritura pública ante un notario. Este documento detallará la descripción de cada una de las nuevas fincas resultantes, sus linderos, superficies y cuota de participación en los elementos comunes.

Finalmente, para culminar el proceso de registro, la escritura pública debe inscribirse en el Registro de la Propiedad competente. Es necesario abonar los impuestos correspondientes, como el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (IAJD), y presentar en el Registro de la Propiedad la documentación notarial junto con la licencia de segregación y el justificante del pago de impuestos.

Una vez inscrita la segregación, el propietario tendrá en su poder las nuevas escrituras de las propiedades segregadas, que le permitirán disponer de ellas de forma independiente. Este proceso es fundamental para garantizar la seguridad jurídica tanto del propietario como de futuros compradores.